Si has sentido una fuerte pulsión por contactar con esa persona a la que estás conociendo, si ocupa tu mente y tus ganas, al punto de verte inmerso en una serie de dinámicas que apuntan maneras para ser pareja o. llámalo una relación íntima prolongada en el tiempo.

Estas pasando por, lo que algunos llaman, la ENR “energía de la nueva relación”

¿Qué significa la ENR?

La ENR, o energía de la nueva relación, es un término originado, a mediados de los años 80’s, por la activista de poliamor Zhahai Stewart, para designar a un cóctel de sensaciones intensas y apego, que se vive de forma correspondida, al principio de una relación que está en fase de creación.

Aunque el concepto surge en el marco de las relaciones poliamorosas, ya que hace referencia a que la persona que lo experimenta posee de base una relación previa, para la que existe, también, una denominación, con su sigla en inglés, OREold relationship energy, “relación vieja”, no es un fenómeno exclusivo de las relaciones abiertas.

Es que, en esencia, lo que llaman ENR, desde mi punto de vista, se trata de un input emocional propio del ser humano llamado, en una palabra: Deseo.

Un deseo que, vivido de forma inconsciente, no sólo te atrae fuertemente, casi violento, a la persona deseada, sino que también, puede despertarle ganas de formalizar una vinculación con ella. Cuando ambos comparten ese deseo y nutren la posibilidad ¡BINGO! se comienza a dar forma a la nueva relación.

Complejo, ¿verdad?. No te preocupes, es solo al principio.

ENR, Deseo y Enamoramiento… ¡Qué lío!

La energía de la nueva relación, se simplifica comprendiendo que se trata de un deseo intenso por conectar con la persona de la que nos sentimos atraídos, y de igual manera que somos correspondidos, sin esta condición no hay nueva relación posible y nuevos vínculos que formen parte de la red afectiva.

Algunas personas lo separan del enamoramiento, me atrevo a decir que la ENR forma parte de la primera fase de dicho fenómeno, en la que estás endulzando tus deseos con expectativas de relación, pareja, proyectos o experiencias sobre la persona, basados en el sistema de creencias del amor que tengas (exclusivo, romántico, liberal, etc)

Sin la correspondencia no hay nueva relación, aunque sí puede haber enamoramiento.

energía nuevas relaciones

Que pasa cuando estás en ENR

Cuando estás en un estado de primera fase de enamoramiento, con o sin ENR, sientes una alta intensidad y emoción frente a la nueva relación o persona que estás conociendo porque se liberan una serie de hormonas como la dopamina que refuerzan la sensación de felicidad, disfrute o placer, que te invitan a repetir y, en algunos casos, de forma algo excesiva, según para quién.

Es por esto que se habla de personas que son “adictas al amor” o, mejor dicho, al subidón del enamoramiento, y cuando sienten que la euforia baja y regresan a un estado neutral, deciden cortar o dejar la relación que habían empezado, en vez de haberlo vivido desde el principio como un deseo sexual-afectivo. No les interesa nutrir el cariño o crear convivencias.

La ENR y el enamoramiento tienen una alta carga sexual y emocional que cuando no es correspondida incitan a una fuerte frustración y duelo.

Cómo gestionar la ENR en el poliamor (y no poliamor)

Ante la vorágine excitante que estamos sintiendo al conocer una nueva persona, tenemos dos opciones:

Hacernos preguntas que nos permitirán tomar consciencia de nuestro deseo, par elegir con distancia -salir un poco del piloto automático-, o bien dejarnos llevar por las sensaciones y tomar decisiones o construir vinculaciones a la ligera y de las que podamos arrepentirnos, razón por la que se recomienda no tomar decisiones vitales “bajo los efectos de la ENR”

Cuando estás solo, es decir, no tienes parejas principales o un compromiso particular con una red afectiva, puede ser que te resulte más sencillo gestionar la ENR, pues solo has de gestionarte a ti o la nueva persona, pero cuando partes de “viejas relaciones”, seguramente, tengas compromisos, menos tiempo y una convivencia formalizada a la que seguir cuidando y que entrará en un proceso de transformación.

Y, para esto último, si tienes sensibilidad y empatía, querrás saber cómo gestionar con tacto y responsabilidad afectiva, la inclusión de este nuevo vínculo a las dinámicas de la red afectiva o la pareja.

Esto último varía de acuerdo a varios factores, pero son muchos los casos en los que algunas personas se sienten descuidadas o temen ser dejadas por su pareja durante una ENR, cuando no hayan incurrido en esto último.

Para no dejarte con la duda de cómo hacerlo si te encuentras atravesando este estado, te comparto una serie de preguntas básicas para gestionar a primeras, la ENR en el poliamor.

poliamor y enr

Gestionar la ENR en el poliamor con consciencia y tacto:

  • ¿Qué compromisos y acuerdos tienes actualmente y cómo se pueden compaginar con esta nueva relación?
  • ¿Cuál es el sentido de esta nueva relación y cómo la van a materializar? ¿Cuál es el sentido de tus otras relaciones?
  • ¿Qué papel juegan las demás personas dentro de la red afectiva?

Como verás la ENR o el enamoramiento, es otro de esos momentos claves en el poliamor porque según cómo lo sepas llevar, transformarás tus relaciones: se crean triejas, nuevas convivencias, se vetaran personas, se abrirán relaciones o se revisan acuerdos.

Lo importante, desde mi punto de vista, a modo de hermana mayor, es que te tomes el tiempo que necesites para clarificar tus deseos y que las decisiones que tomes, aunque no las entiendas a primeras, siempre sean para el gran mayor bien, asumiendo las consecuencias que eso traiga, comunicado desde el corazón y con la mente bien despierta.